Durante mucho tiempo el discurso “las redes sociales no son para vender” era una de las premisas iniciales en una estrategia de marketing digital, las marcas y empresas a menudo querían medir sus objetivos digitales con el kpi de venta, y aunque se hicieran todos los esfuerzos para motivar a una compra y llevar a tu público lo más lejos en el funnel de venta, sin una plataforma de e-commerce realmente funcional y amigable, se volvía complicada la conversión.

En el 2020, al filo de la pandemia por covid-19, la historia da un giro completamente diferente, las empresas de todo tipo se ven obligadas a modificar sus procesos de venta, ya que los clientes no podían salir a la calle por ellos y ellos no podían tener sus locales abiertos para atender al público, la pregunta era ¿Qué podemos hacer para mantener las ventas mientras la población a nivel internacional se encuentra en cuarentena? La respuesta era obvia, se necesitaba hacer ventas de manera “digital” o en línea.

Las empresas grandes y emprendedores con presupuesto, optaron por desarrollar sus propias plataformas robustas de e-commerce, en donde tenían todos sus productos inventariados; pero los comerciantes más pequeños, se vieron en la necesidad de vender e invertir en marketing digital, tomando una fotografía al producto, subirla a sus redes sociales y colocarle precio, y generando links de pago en línea, transferencias o contraentrega: sencillo, amigable y rápido para el usuario.

¡Qué gran cambio estaban por generar en el comercio electrónico! Durante el 2020, según la Defensoría del Consumidor en El Salvador, las ventas virtuales incrementaron un 83%, siendo las RRSS el principal medio para adquirir productos y/o servicios, hoy, en el 2023, todas o casi todas las redes sociales cuentan con formatos propios de venta incorporados en sus plataformas.

Pero, realmente, ¿qué es lo necesario para incrementar mis ventas por este medio, si ya cuento con mi plataforma de venta en línea?

Y lo primero, y como siempre, objetivos claros y públicos bien definidos, esta es la base de cualquier tipo de estrategia que se quiera llevar a cabo, sabiendo qué es lo que queremos lograr y a través de quiénes todo será más sencillo.

Si cuentas con una plataforma de e-commerce fuera de las redes sociales, un buen SEO nunca será negociable, las estrategias de inbound marketing son las ideales para lograr esto.

El apoyo del email marketing, (sí, el email marketing sigue siendo una herramienta de gran ayuda), siempre será excelente, contar con una base de datos de contactos interesados en tu producto o servicio y poder hacer un seguimiento más “personalizado” de ellos será de gran ayuda para lograr conversiones o fidelizar clientes.

Una vez aterrizado los primeros puntos, nos vamos al trampolín: la pauta publicitaria, esta te ayudará a posicionarte no solo en las plataformas si no, para llegar exactamente a tu público meta, pero la pauta necesita ser funcional y efectiva, para esto es importante tener contenido de valor para el público y en donde tu producto o servicio se muestre tal cual, con todos sus beneficios. La optimización de la pauta publicitaria y el seguimiento de conversiones será primordial para saber si tu estrategia está dando resultados, un buen CRM siempre será de gran ayuda.

Hay muchos otros caminos para lograr el incremento de las ventas gracias a las estrategias de marketing digital, pero te he mencionado las principales, lo interesante y apasionante de este mundo es que estas siempre están en constante cambio y lo que te funciona ahora, puede que en dos o tres años ya ni siquiera exista, estar en contacto con tu público y saber cómo consume contenido digital será primordial para escoger formatos idóneos. ¿Quieres saber más al respecto? ¡En Grupo Plan B podemos ayudarte!